Volvió Benítez!

El agente Benítez está otra vez en suelo patrio. Se muere de ganas de volver a dirigir el tránsito en los más complejos cruces provinciales. Pero su viaje a Europa lo catapultó a la fama y el mismísimo interventor de la Policía Bonaerense lo mandó llamar a su despacho para que cuente cómo le fue con lujo de detalles. Ilustre, Benítez! Leyenda!

Herencia Benítez

Como el pasaje de regreso del agente Benítez a la Argentina lo sacaron los mandos bonaerenses, nuestro infatigable amigo deberá cumplir un periplo un tanto extenso; porque así era el itinerario del ticket aéreo más barato: salida de Frankfurt con destino a Buenos Aires, previas escalas en Roma, Tenerife, Ciudad del Cabo, Ottawa, Río de Janeiro y Asunción, en ése orden. Pero no desesperen.
Mientras Benítez regresa compartiremos con ustedes una joya de nuestro archivo.
Esta fotografía nos muestra al abuelo del agente, que en los años 40 vivió en Nueva York, posando junto al vehículo de Batman, de quien dicen fue gran amigo. Una prueba más de que el amor del Benítez por servir a la ley es genético. Más familias como la suya
necesitamos en este país, Benítez!

Acá estaba Benítez!

Contrariamente a lo que muchos pensaban, después de su labor majestuosa en el operativo de seguridad de la Copa del Mundo, el inconfundible agente Benítez no estaba ni perdido en los Alpes, ni drogado con un grupo de hippies, ni durmiendo en un prostíbulo de Amsterdam.
¡Benítez cumplía una misión secreta de los altos mandos europeos!
Estaba en Francia participando de una reunión clasificada con grandes defensores de la ley.
En la imagen, el momento en que Benítez conoce a los Tres Mosqueteros, que son cuatro, desde ya. Entre todos debaten ideas para combatir el crímen organizado. Benítez no entiende nada porque no habla francés pero igual se saca una foto con D’Artagnan, a quien aparece abrazando en la imagen.

De todos modos nuestro agente ya está un poco cansado de tanta gira europea y decide volver a la Argentina. Tiemblen hampones, Benítez regresa!

Benítez informa

Todos sabemos que nuestro querido agente Benítez se ha convertido en una celebridad internacional. Es por eso que a su blog han comenzado a llegar indeseables comentaristas que pretenden que los lectores hagan click en links que llevan a ca.sinos en línea, vendedores de V.Iagra, enlargadores de pennys, etc, etc. Digamos que... apareció el SPAM apareció.
Por eso Benítez ha decidido que cada vez que alguno de sus fans reales quiera dejar un comentario haga una verificación de palabra para comprobar que es un verdadero fan, y no un mercachifle.
Sigue sin ser necesario estar registrado como blogger y todo eso, pero para cuidar a todos nuestros ordenadores habrá que dar un paso más.
Sonrían, Benítez los ama.

¡Apareció Benítez!

Y claro... tenían que ser policías sudamericanos los que al fin encontraran al noble agente Benítez, perdido en los Alpes desde hace casi diez días. El envío de tropas locales no fue en vano. Nuestros expertos motociclistas dieron con su colega y ya emprendieron el regreso a nuestro país.
¿Dónde estaba Benítez? todos lo sabremos muy pronto... mientras tanto nuestro agente favorito nos envió esta instantánea de su amigo Edilson Tobías (uno de los que lo encontró) al mando de una motocicleta policiaca europea que hasta tiene limpiaparabrisas y techo corredizo ¡Esas son máquinas!

Se acaba la mentira

Definitivamente, el agente Benítez no aparece en los Alpes. Las fuerzas policiacas de tres países que lo rastreaban por la montaña no consiguieron nada.
Es hora de acabar con la farsa primermundista y convocar a los mejores efectivos de la bonaerense para que resuelvan el tema prontito. Allá van nuestros motociclistas entonces, lo mejor de las tropas locales. A por ellos! Y traigan a Benítez o vuelvan con los pies por delante!

En las fotos de arriba, a la izquierda, el agente Braulio Firpo, y su primo Ramón Vandor, un bicipolicía de la primera hora. Más abajo, el oficial de caminos Gustavo Rucci y abajo de todo, el prefecto Edilson Tobías, un ranger uruguayo que siempre colabora con los muchachos y aprecia mucho a Benítez.

¡Benítez no aparece!

El agente Benítez sigue extraviado en los Alpes. Los esfuezos de los equipos de rescate locales siguen sin dar frutos, pero los colegas de nuestro querido agente no descansan. Han prometido hallarlo pase lo que pase y a cualquier costo. Las policías de tres países no cesan en la búsqueda.

El oficial italiano Genaro Catarzi practica un poco de esquí de fondo. Mientras se desliza por la nieve mira hacia abajo para ver si Benítez anda por ahí convertido en cubito.







El mejor hombre de los serivicios secretos alemanes, Hans Jurgens, abandonó su bicipatrullero hace dos días y desde entonces escala las laderas más peligrosas buscando a Benítez. En una cueva encontró un hombre de neanderthal congelado pero lo dejó a un costado y siguió. El objetivo es Benítez y sólo Benítez. ¡Fuerza, Hans!

Desesperada búsqueda de Benítez

Hace días que no se sabe nada de Benítez. El agente bonaerense vacacionaba en los Alpes, tuvo un percance con su coche y desde entonces no se tienen noticias de él. Comenzó el operativo de rastrillaje. Sus colegas europeos lo buscan por cielo y tierra.

Los fans de Benítez exigen explicaciones a la policía montada cisalpina: "¿Cómo que no saben dónde está nuestro agente favorito?"

Genaro Catarzi y Hans Jurgens, dos expertos bicipolicías alpinos, aseguraron: "Encontraremos a Benítez cueste lo que cueste". Bravo, oficiales, ¡así se habla! Detrás de ellos, la carpa operativa que se montó al pie de las montañas para coordinar la búsqueda.

En la imagen, Vilma, una cabra rastreadora que prestó un pastor zoofílico.

¿Y Benítez?

¿¿Alguien vio a Benítez??

Lo último que se supo de él era que andaba perdido por los Alpes suizos...

Benítez en los Alpes

De regreso en Alemania, el agente Benítez decide conocer los Alpes. Para eso alquila un pequeño coche que le resulta encantador. Le han dicho que es el vehículo europeo del momento. Lo que no le han advertido es que es un auto de ciudad y cuando Benítez pretende probar sus aptitudes off road en plena montaña se queda varado. En la foto le pide auxilio a tres mochileros suizos que fuman hachis debajo de un árbol.

Benítez en Belfast II

El agente Benítez sigue en Irlanda. Un taxi que estuvo a punto de abordar acaba de volar por el aire con una gran explosión, justo cuando él entraba a un pub a pedir una cerveza caliente.
Tras el estallido se escuchó a una muchedumbre gritar "¡IRA, IRA, IRA!".
Será cosa del fútbol -piensa Benítez- qué violentos son los hinchas aquí, vaya modo de festejar un triunfo. Menos mal que él está de vacaciones y no se ve forzado a intervenir. Pida esa cerveza caliente, Benítez, o vuelva a Europa continental que va a estar más seguro!

Benítez en Belfast

De paseo por Europa y ya que estaba conociendo Inglaterra, el agente Benítez decidió cruzar la frontera para adentrarse en Irlanda. Este taxi inglés le llamó la atención y decidió abordarlo para regresar al territorio de la reina. Lo sorprendente es que el chofer no aparece por ningún lado y el relojito cuentafichas funciona para atrás a modo de cuenta regresiva emitiendo pitidos. Mmmmm… acá hay algo raro, agente… Mejor bájese de ese taxi y vaya a tomarse una cerveza caliente!

Benítez en Londres

El agente Benítez sigue su recorrida por Europa. En este momento está en Londres, desde donde nos envía esta preciosa fotografía. Benítez vio estos colectivos tan pintorescos e intuyó que si subía por atrás se ahorraría el boleto. Grande fue su sorpresa al descubrir al guarda en ese mismo acceso. Cuidado Benítez, que los ingleses están un poco paranoicos. No se pase de vivo, pague el libras y viaje en el piso de arriba!

Placeres Benítez

Estos gustos sólo podía dárselos en Europa. Benítez está tan contento con su viaje… Policías de todos los países… Un colega italiano le prestó un fitito convertible y Benítez tuvo el honor de darle varias vueltas manzana. ¡El sueño del pibe, Benítez! ¡Si lo vieran los muchachos!