
Apréciese cómo el corredor se está calzando bien los guantes para darle una tunda al agente. Sépase también que por tratarse de un ícono del deporte peronista, Benítez aceptó la zurra sin chistar. ¡Eso es lealtad, Benítez!
Benítez es un servicial agente de tránsito de la policía bonaerense argentina. Benítez extiende su brazo derecho para brindar ayuda al débil pero también para castigar al hampón. Benítez lucha, siente, ama, odia. Esta, es su historia cotidiana.
Bien, queridos fans del agente Benítez, seguimos entregando pura emoción para el recuerdo. Ante todo, nuestro noble servidor de la ley desea avisarles a todos que aquel Ford Falcon junto al cual posó su padre era color cremita, no verde. Tranquilos con eso.
Es más. En esta foto del mismo catálogo de 1963, el padre de Benítez nos muestra algunas diferencias entre un Falcon para personas decentes y un Falcon para personas inmundas.
Por ejemplo, como señala el agente, las personas de bien andan en autos CON patente. Y había más...
Los baules grandes y amplios, como el de este Ford, son para llevar muchas valijas al salir de vacaciones con la familia; NO para otras cosas. En fin... ¿Quién duda que la familia Benítez siempre bogó por la paz, el orden, la tolerancia, la honradez, etc.? Pero con los jefes que han tenido... Madre mía...Pero no hemos de empañar la intachable trayectoria de los Benítez. Que persista en la memoria esta última imagen, la más picante, donde Benítez explicaba lo espaciosos que eran los asientos del Ford Falcon para interactuar con señoritas! ¡Epa, Benítez, su padre resultó ser un picarón!